Incumplimiento de acuerdos, abuso de poder y cerrazón del alcalde han motivado la inconformidad.


Pobladores de la localidad de San Pedro Muñoztla, encabezados por el presidente de comunidad Gregorio Muñoz, responsabilizaron al alcalde de Chiautempan, por generar el conflicto con la población que derivó en los hechos violentos del pasado lunes, debido a que lo señalaron de incumplir acuerdos, de abuso de poder, cerrazón, imposición y de confrontar a la población.

En conferencia de prensa, en la que se hizo acompañar de vecinos que fueron detenidos por los policías municipales, fijaron su versión de los hechos y desmintieron haber sido los causantes de la confrontación violenta que dejó varias personas heridas, entre ellas dos servidores públicos y varios ciudadanos de la comuna.

De entrada desmintió haber querido beneficiarse personalmente con el proyecto, como lo señaló el alcalde, ya que afirmó que la comunidad por acuerdo de asamblea, propusieron a una constructora para realizar los trabajos, la cual el dueño es originario de la comunidad, pero tiene domicilio fiscal en la Ciudad de México, quien se comprometió con el pueblo de dar trabajo a los vecinos en caso de ganar la licitación, lo cual beneficiaría a varios pobladores que se habían visto afectados por la pandemia.

Sin embargo, recriminó que el alcalde les cerró el paso e impuso a otra empresa que conviniera a sus intereses, quien de manera exprés, fue quien ganó la licitación.

Asimismo, explicó que el pasado 13 de febrero, acordaron seguir manifestándose con el proyecto pero de manera pacífica; sin embargo, los vecinos del panteón que también se han inconformado con las obras, determinaron colocar una barda en el acceso a sus viviendas que comparten con el panteón, en donde también pusieron una cadena y dos postes para controlar el acceso.

Sin embargo, explicaron que el lunes que llegaron camiones con material para las obras, se percataron de la cadena y los vecinos señalaron que no tenían permitido el acceso, por lo cual minutos después arribaron elementos de la Policía Municipal, quienes además de intentar romper la cadena y los postes, arremetieron contra los vecinos presentes y los detuvieron, entre ellos adultos mayores y mujeres que nada tenían que ver con el asunto y que estaban presenciando la situación.

Al ser detenidos y trasladados con exceso de fuerza y abuso policial, los vecinos se inconformaron y molestos intentaron hacer presión en la Dirección de Seguridad Pública Municipal, para que liberaran a las personas, pero fueron repelidos con gases lacrimógenos, lo cual encendió aún más los ánimos, y generó una reacción por parte de los pobladores quienes enardecidos tomaron actitudes que se salieron de control, como la retención y golpiza de los dos servidores públicos.

Asimismo, recriminaron el abuso de los oficiales y el exceso de fuerza con el que se condujeron los oficiales, luego de haber acordaron el intercambio de detenidos por la tarde, que incluso alcanzó al presidente de comunidad, a su esposa y vecinos, quienes también fueron detenidos, golpeados y amenazados en el trayecto y al interior de la comandancia municipal.

En resumen, los pobladores responsabilizan al alcalde Héctor Dominguez de haber provocado con sus actitudes el conflicto que tuvo un episodio violento el pasado lunes, y dijeron romper el diálogo con él para el tiempo que le resta a su periodo de gobierno y como pueblo han acordado no tener ningún trato con el munícipe, por incumplir los acuerdos e imponer sus intereses en el pueblo.

Además mantendrán su postura de no permitir la construcción del panteón municipal, y en su defecto pidieron al Gobierno del Estado su intervención en el conflicto y pusieron a disposición el predio para que sea construida en su lugar una institución educativa o para otro fin, que no sea el panteón municipal, por las situaciones antes relatadas, aunado a que demandarán al ayuntamiento por las lesiones provocadas y pedirán incluso su destitución del cargo.