“La vegetación, la tierra y el agua, reguladores de temperatura en isla de calor urbana”: Dra. Anne Kristiina Kurjenoja.
¿Cómo ha crecido la temperatura y humedad en las ciudades debido a su diseño?, fue la pregunta que analizaron académicos-investigadores y egresados del Departamento de Arquitectura de la Universidad de las Américas Puebla, durante el webinar titulado ¿Isla de calor urbana o calentamiento global?
El evento estuvo moderado por el Dr. Edwin González Meza, académico del Departamento de Arquitectura de la UDLAP, quien para iniciar la actividad dio uso de la palabra a los egresados Mónica Alatorre Fernández de Lara y Emmanuel Guarneros Ortiz, quienes hablaron y definieron a la isla de calor como la acumulación de calor debido a la inmensa masa de concreto y algunos otros materiales absorbentes de calor.
Asimismo, dijeron que éste se da en ciudades grandes y se ha observado que este fenómeno aumenta con el tamaño de la ciudad y es directamente proporcional al tamaño de la mancha urbana.
“Entre mayor es la densidad de la ciudad, mayor es el aumento de la temperatura en comparación con ciudades más pequeñas en donde el aumento de la temperatura es menor”, comentó Emmanuel Guarneros. Los egresados de la Universidad de las Américas Puebla también presentaron algunas estrategias implementadas para contrarrestar este efecto en las ciudades, tomando como ciudad modelo a Veracruz donde el promedio de temperatura va de los 25 a los 30 grados.
“Para contrarrestar este efecto de isla de calor en la ciudad de Veracruz aplicamos tres estrategias diferentes: la primera tiene que ver con la construcción de cañones urbanos; la segunda, asfalto con pasto a los lados; y la tercera, vegetación”, explicó Mónica Alatorre.
Finalmente, las conclusiones que dieron los egresados fueron: “Nosotros como arquitectos no podemos evitar retener el calentamiento global pero sí podemos hacer que con diferentes estrategias se reduzca este efecto de isla de calor en las ciudades, construyendo ciudades con este tipo de estrategias como vegetación, cañón urbano y el uso de tipos de materiales en nuestros pavimentos”, comentó Emmanuel Guarneros.
En su turno, el Dr. Iván Oropeza Pérez, coordinador de Investigación y Producción de Conocimiento, explicó que no es correcto pensar que la isla de calor es consecuencia del calentamiento global.
“Los dos fenómenos son completamente independientes uno del otro y lo que quiero plantear es que a nivel arquitectura y a nivel de desarrollo urbano, las estrategias tanto de mitigación de la isla de calor como de mitigación de gases de efecto invernadero que produce el calentamiento global están muy unidos, y sus estrategias van de la mano en el sentido de tratar de tener un confort térmico para las personas que están dentro de la ciudad”, mencionó el Dr. Oropeza, quien además dio estadísticas importantes proporcionadas por la Agencia Internacional de Energía: “La actividad del sector edificios y construcción consume el 36% de la energía final total del mundo; también mencionan que el sector edificios y el sector de la construcción es el responsable del 39% de los gases de efecto invernadero y de ese 39% el 11% viene por la manufactura de la construcción de los materiales y el otro 28% es consumo energético generado por la operación del edificio”.
Finalmente, el Dr. Iván Oropeza expresó que “los arquitectos o los urbanistas tienen la opción no solamente de cambiar o frenar el efecto del calentamiento global al hacer e implementar cierto tipo de estrategias como lo son la captación de agua pluvial, el uso de árboles o vegetación para absorber el agua, las hortalizas urbanas, entre otros”.
El Dr. Marco Enia, académico del Departamento de Arquitectura, dijo que tanto la isla de calor como el calentamiento global en parte se deben a la manera como diseñamos un territorio de ciudad y de alguna manera la forma en la como la usamos.
“La isla de calor urbano se debe claramente a cómo está diseñada la ciudad, qué materiales se emplean, cuál es la densidad urbana, y si hay presencia de áreas verdes. También tiene algo que ver, quizá, la manera en la que la usamos, el uso masivo de coches privados para desplazarnos, lo que implica la construcción de calles de asfalto que ocupan todo el territorio, quizás el uso de sistemas de calentamiento y aire acondicionado”.
Sobre el calentamiento global mencionó que también en buena medida se debe a cómo diseñan el territorio y cómo lo usamos, “porque la huella de carbono de las ciudades se debe en buena medida a como está planteada actualmente la entidad urbana y en parte a los materiales y sistemas constructivos que se usan más a menudo por el sector de la construcción”. Finalmente, la Dra. Anne Kristiina Kurjenoja, directora académica del Departamento de Arquitectura, desarrollo los temas de relacionalidad y responsabilidad.
“Con la relacionalidad me refiero a la relación que el ser humano ha mantenido con el entorno, cómo lo ha entendido como recurso; y con la responsabilidad la cual tenemos con el desarrollo de los fenómenos de la isla de calor y el calentamiento global”.
Asimismo, explicó que “el calentamiento global es un fenómeno natural que ha sucedido toda la existencia de nuestro planeta y que por la actividad humana los cambios climáticos se han acelerado; por otro lado, la isla de calor urbano es un fenómeno totalmente humano y por lo tanto tenemos una mayor responsabilidad que tenemos que asumir”. Con relación a lo anterior, la Dra. Anne Kristiina Kurjenoja dio a conocer tres factores que son importantes como reguladores de temperatura en isla de calor: la vegetación, la tierra y el agua.
La Universidad de las Américas Puebla los invita a visitar https://www.udlap.mx/webinarsacademia/historico-temporada1.aspx en donde encontrarán todos los webinar que se realizaron como parte de la primera temporada.