Organizaciones mexicanas y alemanas demandan a las empresas asumir su responsabilidad.

Representantes de organizaciones no gubernamentales mexicanas y alemanas señalaron a empresas como Volkswagen y su proveedora ZF como principales responsables de la contaminación al agua, aire y suelos en al menos seis estados de la República Mexicana, entre ellos Tlaxcala y Puebla.

Sentenciaron que las actividades desarrolladas por industrias de capital alemán en diferentes regiones de México han producido también impactos a la salud de la población, que coinciden con el asentamiento de esas compañías en esas regiones del país por lo que están “bajo sospecha de haber contribuido a estos daños medioambientales y contra la salud”.

En el marco de una gira virtual en Alemania, MISEREOR, la Oficina Ecuménica por la Paz y la Justicia de Munich y la Coordinación Alemana por los Derechos Humanos en México, junto con organizaciones mexicanas contrapartes, como el “Centro Fray Julián Garcés Derechos Humanos y Desarrollo Local de Tlaxcala, demandan a las empresas asumir su responsabilidad e implementar medidas que garanticen la protección de la naturaleza y de las personas.

Recordaron que en diciembre del año 2019 se llevó a cabo el denominado “Toxi-Tour”, en la que participaron integrantes del Parlamento Europeo, científicos, científicas y representantes de organizaciones de la sociedad civil, visitando las zonas afectadas dando cuenta de los efectos nocivos de la contaminación de las industrias tanto en el medio ambiente como en la salud de la población,

Al respecto, el toxicólogo Peter Clausing de la organización “México vía Berlín” consideró que “las compañías transnacionales cumplen en México menos normas medioambientales” y agrega “aquí se ve la necesidad de una ley que regule la cadena de suministros, tanto en Alemania como en Europa. Las empresas alemanas deben garantizar, también en el extranjero, que no violan derechos humanos con sus actividades y que sus proveedores respetan los estándares medioambientales alemanes”.

En ese sentido, la directora de la asociación civil mexicana “Centro Fray Julián”, Alejandra Méndez Serrano declaró que el Gobierno mexicano se muestra dispuesto a trabajar en un plan para gestionar los daños producidos, pero también destaca que “nuestras conversaciones en Alemania deben contribuir a evidenciar la dimensión internacional de esta problemática”.

Agrega que Alemania y Europa son corresponsables de los daños al medio ambiente y a la salud en México. Los diálogos bilaterales entre México y Alemania deben tematizar la forma de evitar estos daños en el futuro. También las empresas deben actuar ante las acusaciones e investigar el impacto de sus actividades industriales en el medio ambiente y en la salud.”

El “Centro Fray Julián Garcés” apoyado por MISEREOR, lleva años denunciando la dramática destrucción del medio ambiente en Tlaxcala. Este estado de la República mexicana, junto con los de México y Puebla y la región de la capital forman las cuatro regiones industriales más importantes de México. Varios estudios académicos, también de la renombrada Universidad Nacional de México, UNAM, han evidenciado la relación directa entre los residuos industriales, la contaminación del río Atoyac y el aumento de los casos de varias enfermedades entre la población. Se han documentado cáncer, insuficiencia renal, abortos y malformaciones en los recién nacidos.

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