Flaming Lip se presentó en un programa de t.v. y usó burbujas gigantes individuales tanto para los músicos como para el puñado de seguidores que los vio en vivo.
Mientras la industria musical busca nuevas formas para reactivar sus actividades, The Flaming Lips parece haber encontrado la solución. Anoche, el grupo liderado por Wayne Coyne se presentó en Late Show con Stephen Colbert y usó burbujas gigantes individuales tanto para los músicos como para el puñado de seguidores que los vio en vivo mientras interpretaban «Race for the Prize».
El recurso en sí no es una novedad para el grupo, ya que es uno de sus trucos escénicos más conocidos. En sus presentaciones, Coyne suele introducirse en una esfera inflable transparente para surfear sobre el público. Esta vez, The Flaming Lips decidió ir un poco más allá e incluir no solo una para cada uno de sus integrantes sino también para algunos fans, que pudieron verlos repasar la canción que abre The Soft Bulletin (1999) sin romper el distanciamiento social.
Y lo que en cualquier otro grupo sería una excentricidad, para la banda de Oklahoma fue un día como cualquier otro. The Flaming Lips ha hecho una carrera sostenida por decisiones atípicas y extravagantes (a veces en exceso) que van desde Zaireeka, un álbum cuádruple cuyos cuatro discos deben escucharse al mismo tiempo, y un concierto hecho para ser escuchado sólo con auriculares, hasta un vinilo prensado con sangre de la banda y varios músicos invitados, como Nick Cave, Chris Martin y Kesha.