Ante una cuarenta el albergue “La Sagrada Familia” no tendría la capacidad de atender a la población migrante.
A una semana de la implementación de medidas preventivas para cortar la cadena de contagio por Coronavirus (COVID-19) en Tlaxcala, el albergue para migrantes “La Sagrada Familia” ubicado en el municipio de Apizaco opera pero con la implementación de medidas para evitar la propagación del virus entre usuarios y colaboradores.
Al respecto, el responsable del albergue para migrantes, Elías Dávila Espinoza comentó que la afluencia ha sido normal durante estos últimos días, y reportaron alrededor de 70 personas provenientes de países de Centroamérica, quienes únicamente permanecen dos días en la casa para reponerse físicamente, curar heridas y malestares, descansar, asearse, y seguir su comino.
Comentó que al ingreso los migrantes responden un cuestionario respecto a los lugares en los que han estado para identificar situaciones de riesgo, principalmente con migrantes en retorno de Estados Unidos, además se toma la temperatura corporal, y se corrobora que no presenten síntomas de enfermedades respiratorias, tos, flujo nasal, y ya adentro se obliga el uso de gel antibacterial, y el lavado constante de manos, entre otras medidas con el propósito de frenar la cadena de contagio “por su bien, y por el bien del personal”.
Comentó que en caso de que las autoridades decreten la obligación de cuarentena, la casa del migrante no tendría la capacidad para mantener a un grupo grande migrantes en esa condición por lo que pediría el apoyo de las autoridades tanto federales como estatales, aunque en este caso ya se ha puesto con en contacto con la delegación del Instituto Nacional de Migración (INM) cuyo representante en Tlaxcala argumentó que tampoco tendrían la capacidad de hacer frente a una situación como esa.
También, dijo que por lo pronto han restringido el acceso a la casa del migrante a personas que llegan de visita, a personas con síntomas de resfriado, tos, y otros malestares relacionados con el sistema respiratorio, incluso se ha pedido a las y los migrantes que están recibiendo asilo en estos momentos que disminuyan sus salidas a la calle para evitar contagios.
Esperan que en un periodo de 20 días el flujo de migrantes disminuya, ya que las personas que están en tránsito son las que salieron de sus lugares de origen antes de que la Organización Mundial de la Salud decretara pandemia por COVID-19.