En 2019, se registraron 5,347 llamadas por abuso sexual a mujeres, significando un alza del 36% en tres años. Puebla se encuentra entre los diez municipios con más feminicidios en México.


El Día Internacional de la Mujer, conmemorado cada 8 de marzo, ha sido promovido por la Asamblea General de la ONU desde 1977. Si bien su interpretación específica ha atendido a múltiples necesidades, este año llega en el marco de uno de los movimientos feministas más enérgicos en la historia reciente de México.

Durante una jornada especial celebrada por el Instituto de Derechos Humanos Ignacio Ellacuría, SJ (IDHIE) de la IBERO Puebla, el Mtro. Mario Ernesto Patrón Sánchez, Rector de nuestra Casa de Estudios, reconoció que tenemos un entorno violento que pone en riesgo la integridad de las mujeres. “Somos generadores de nuestras propias violencias, más en un ambiente Universitario.”

Por ello, recordó la intención institucional de hacerse cargo de las violencias internas. En días recientes, se ha explicitado la necesidad de trabajar en materia de género a nivel jurídico y social, así como en la construcción de nuevas masculinidades. “La violencia de género es una práctica de discriminación extrema en razón de género a la que no podemos ser indiferentes”, dijo. El Mtro. Patrón Sánchez recordó que la mirada ignaciana exige poner en el centro a más de la mitad de la población de nuestra Casa de Estudios. “No podemos ser indiferentes a los gritos feministas que retumban cada semana.”

Por eso, extendió su solidaridad y gratitud hacia las mujeres que han impulsado la lucha contra la violencia sexual, como Valentina Rosendo y las mujeres de Atenco. En complemento, el Dr. Francisco Valverde Díaz de León, director general del Medio Universitario, recordó que una de las funciones sustantivas de las universidades es la difusión del conocimiento a través de reflexiones sobre la realidad.

“Estamos conmemorando un día que abona cuestionamientos de nuestro entorno”, mencionó. Se refirió al libro Obras Feministas de Marcela Lagarde como un referente que le ha impactado para comprender el modus operandi del mundo actual. “A casi un siglo de estos textos, seguimos con las mismas ideas: no nos hemos movido.” Desde la epistemología feminista, el Dr. Valverde evocó la diferencia histórica que permite reforzar la concepción de igualdad. “Las mujeres son diferentes de las mujeres y viceversa por condición de género, un constructo social en cuestiones específicas.”

Cerró su intervención llamando a comprender la realidad para poder cambiarla. Los feminismos ante el asesinato Durante la Jornada, se presentó el cortometraje documental Nosotras, producido por la asociación

El Día Después, el cual aborda las microviolencias que pasan desapercibidas o incluso legitimadas por la sociedad, siendo el feminicidio la manifestación máxima de la violencia de género. Previo a la proyección, la Mtra. María del Rosario Arrambide González, directora del IDHIE de la IBERO Puebla, denunció que las mujeres se encuentran en un estado permanente de indefensión, pues, por diferentes factores, la violencia no es denunciada.

En contraste, cuando sí se hace, el proceso jurídico no es atendido de manera adecuada. De 1960 a 2020, se registraron 2,998 personas desaparecidas en Puebla, siendo el 48% mujeres. Esto representa un 22% por encima del promedio nacional. Si bien se han implementado estrategias como la activación de la alerta de género en nuestro estado desde abril de 2018, las estadísticas demuestran pocos o nulos avances en la erradicación de crímenes contra la mujer.

Recuperando este contexto, Ixchel Cisneros Soltero, directora de la asociación El Día Después, enfatizó que la importancia de destacar el asesinato de mujeres por encima del resto de los homicidios es que las víctimas de feminicidio son sujeto de muertes violentas, muchas veces a manos de personas cercanas a ellas.

El Paro Nacional de Mujeres es una oportunidad para poner manos a la obra en las cuentas pendientes con la población femenina. “A partir de ese día, las mujeres tendrán todo el derecho de señalar los compromisos que empresas y organizaciones han hecho con nosotras. Te uniste al paro, ¿qué más?”, sentenció la activista. Ixchel Cisneros alabó el valor de las nuevas redes de sororidad que no existían en otros tiempos.

A su vez, reconoció el trabajo de las feministas de generaciones previas, cuyo trabajo fue crucial para llegar a la etapa en la que los movimientos se encuentran actualmente. Cerró su participación refiriéndose a El Día Después, una iniciativa que surgió tras el proceso electoral de 2018. Se trata, explicó, de un organismo de vinculación entre la sociedad civil y los diferentes grupos de activismo dedicados a un sinfín de tópicos.

En consonancia, lanzó un llamado a la acción posterior al estallido de los diferentes movimientos sociales, como es el caso del Paro Nacional del 8 de marzo. Durante la sesión de diálogo con la audiencia, se exploraron temas relacionados con los privilegios de los hombres, la importancia de visibilizar los crímenes de género de las personas trans y la convergencia de diferentes perspectivas feministas que han impulsado diferentes luchas.

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