Cientos de mujeres se manifestaron el viernes en el día de San Valentín para repudiar los feminicidios en México, en especial, por el brutal crimen de una joven y la publicación en algunos diarios de una fotografía mostrando sus restos mutilados.
Las manifestantes, acompañadas por algunos familiares de víctimas, expresaron su indignación por el asesinato de Ingrid Escamilla, de 25 años, encendiendo fogatas y realizando pintas en la fachada de Palacio Nacional, cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador ofrecía su conferencia de prensa diaria.
Imágenes de Reuters mostraron a mujeres vestidas de negro escribiendo con pintura en aerosol frases como “México feminicida” o “nos están matando” en el piso del icónico Zócalo, la principal plaza de la capital, y en las puertas del Palacio, la sede del gobierno donde vive el mandatario y su familia.
“Nos llena de enojo y rabia”, dijo Lilia Florencio, una manifestante. “No nada más es Ingrid (…) hay miles de feminicidios”, agregó la mujer, quien dijo que una hija suya fue hallada muerta en 2017. Un promedio de 10 mujeres son asesinadas diariamente en México, según cifras oficiales.
El año pasado se registró el mayor número de crímenes contra mujeres en tres décadas. En calles del centro histórico de Ciudad de México, las manifestantes, algunas encapuchadas, incendiaron vehículos y desafiaron a la policía frente a las instalaciones del diario La Prensa, que publicó imágenes del cuerpo de Escamilla, mientras coreaban: “Todas somos Ingrid”.
El caso fue condenado por las Naciones Unidas que exigió a las autoridades locales medidas para eliminar la violencia contra las mujeres. “Exigimos el pleno acceso a la justicia y la no revictimización para todas”, escribió ONU Mujeres México en su cuenta de Twitter. Los crímenes contra las mujeres en México han crecido en los últimos años, en medio de un recrudecimiento de la violencia asociada al crimen organizado, que ha alcanzado cifras récord.
“Ya estoy harta”, dijo Diana Gutiérrez, una publicista de 27 años que participó en la protesta que se extendió por varias horas. “El gobierno debe estar creando una estrategia (para combatir los feminicidios), pero no la tiene”.
Durante su conferencia de prensa, López Obrador ofreció su respaldo a la manifestación. “Me pronuncio en favor de las mujeres, en contra del feminicidio (…) estoy en contra del machismo”, dijo.
REPUDIO A VIOLENCIA EXPLÍCITA
El asesinato de Escamilla fue una muestra particularmente brutal en un país acostumbrado a la violencia. La policía encontró el cuerpo de la joven sin algunos órganos y sin partes de su piel. El principal sospechoso, un hombre identificado como la pareja de Escamilla, apareció en un video, manchado de sangre y narrando detalladamente a la policía cómo habrían ocurrido los hechos.
Fotografías de los restos de la víctima fueron divulgadas por algunos diarios en México, entre ellos La Prensa, lo que fue repudiado por usuarios de redes sociales. Un tabloide llamado ¡Pásala! acompañó la imagen con el titular: “Fue culpa de Cupido”. El diario La Prensa dijo en su edición del viernes que durante más de nueve décadas ha trabajado para dar visibilidad a problemas que la autoridad preferiría que no se reseñaran, y aseguró estar abierto “a la discusión” de sus contenidos.