La construcción de un muro en la frontera sur fue una de las grandes promesas de Trump en la campaña previa a las elecciones de 2016.
El presidente Andrés Manuel López Obrador ha defendido que mantiene una «buena» relación con Estados Unidos y que no se «enganchará» por las últimas declaraciones de su homólogo, Donald Trump, que el martes volvió a decir que estaba pagando «muy amablemente» la construcción de un muro en la frontera común.
«Nuestra relación con Estados Unidos es buena, no queremos pelearnos, amor y paz, y aunque nos cuquen no nos vamos a enganchar», ha declarado López Obrador durante su rueda de prensa diaria, en la que ha evitado entrar en nuevas polémicas con el país vecino.
López Obrador ha acusado a la oposición de buscar una «pelea» con Trump mientras «callan» por la detención en Estados Unidos de Genaro García Luna, ministro del Interior durante la etapa de Felipe Calderón y acusado ahora de narcotráfico.
La construcción de un muro en la frontera sur fue una de las grandes promesas de Trump en la campaña previa a las elecciones de 2016 y, ya en la Casa Blanca, el magnate neoyorquino presionó a México en busca de unos fondos con los que llevar adelante su ambicioso plan.
«Nos gusta mucho México, su presidente (Andrés Manuel López Obrador) es amigo mío y está haciendo un trabajo fantástico, pese a ser una situación difícil, pero México está, de hecho, pronto lo averiguarán, pagando por el muro», dijo Trump durante un mitin el martes.