Dijo que carecen de planeación y que solo son para dar por hecho el cumplimiento de una promesa de campaña del actual Gobierno Federal.
Debido a la falta de claridad y transparencia en el manejo de los recursos, así como en la operatividad de las Universidades Benito Juárez, la senadora por Tlaxcala, Minerva Hernández Ramos, criticó la forma en la que operan las casas de estudio al señalar que sólo se tratan de “espejismos” para dar por hecho el cumplimiento de una promesa de campaña del actual Gobierno Federal.
En conferencia de prensa, la senadora panista indicó que no existe la debida transparencia en torno a su operación, ya que tanto en Tlaxcala, como en el país, no hay claridad en torno al manejo y destino de los recursos, los lugares en donde quedarán instaladas, la plantilla docente y administrativa, así como los alumnos y las becas otorgadas, entre otras situaciones.
Señaló que tras una revisión y visita a las dos universidades que están en los municipios de Xaltocan y Cuapiaxtla,se pudo constatar que cuentan con aproximadamente 184 alumnos y ocho docentes y que se imparten las Ingenierías Ambiental para la Sustentabilidad y en Procesos Agroalimentarios; mismas que operan en edificios prestados y con la insuficiente infraestructura y condiciones para llevar a cabo sus estudios.
Detalló que a nivel nacional existe alrededor de 39 mil estudiantes, y poco más de seis mil becas otorgadas; no obstante, se desconocen los motivos por los cuales no se han otorgado al resto de los estudiantes, ni el monto pagado en becas, así como la plantilla docente, la nómina y los gastos operativos, ya que en el presupuesto no se ha ejercido partida alguna para este programa.
Asimismo, no existe la certeza de las zonas en donde quedarán instaladas estas universidades, así como las condiciones de los terrenos, en quien quedará la posesión, y demás aspectos técnicos que no han sido esclarecidos y transparentados los recursos.
Para el próximo año, refirió que existe una partida de mil millones de pesos aproximadamente para este programa, de los cuales el 90 por ciento serán destinados para las becas, y el 10 por ciento restante es para gastos operativos; de esta manera, no existe de manera clara partida económica para la infraestructura y la construcción de las universidades, lo cual genera dudas sobre la fecha del inicio de la construcción y los lugares donde finalmente quedarán instaladas.
Por tal motivo, solicitó al Gobierno Federal y a la Secretaría de Educación Pública federal, para que esclarezca el manejo de los recursos así como la operatividad de este programa, pero sobre todo, que se priorice la calidad de la educación, para que estas universidades sean de gran ayuda para los jóvenes de la entidad.