La Secretaría de Salud dijo que la cifra podría elevarse porque se están procesando todos los estudios realizados a pacientes de varios estados.
La Secretaría de Salud confirmó 12 casos de personas con sarampión importado, uno de ellos aún se encuentra en investigación, que, a su vez, probablemente han contagiado, hasta el momento, a 515 mexicanos aunque la cifra podría elevarse porque se están procesando todos los estudios, en Nuevo León, Monterrey; en Quintana Roo, específicamente en Playa del Carmen y en Playa Aventuras, así como en Ciudad Juárez, Chihuahua; Ecatepec y Coacalco, Estado de México y en San Luis Potosí.
La dependencia federal detalló a través de su Boletín Epidemiológico que desde el 10 de febrero hasta el 17 de agosto se han identificado esa docena de casos, uno de ellos aún por confirmar, que también involucra a 448 a extranjeros en territorio nacional que, al igual que los mexicanos asociados con el contagios, están siendo sujetos de análisis de PCR –Prueba Reactiva de Polimerasa que analiza fragmentos de ADN– para dimensionar la problemática en el país.
No obstante, en el Boletín Epidemiológico, con corte en el 19 de agosto, el Sistema de Vigilancia Epidemiológica de Sarampión y Enfermedad Febril Exantemática reporta 2 mil 633 sospechosos, de los cuales, 2 mil 543 fueron descartados y 103 en estudio. No ha confirmado ningún caso autóctono, es decir, que surgiera en el país y se propagara en la comunidad, con potencial de pandemia.
En cuanto a los casos importados, las autoridades federales refirieron que los 10 positivos de mujeres y dos de hombres, el virus provienen de Europa y en dos casos de África. Sin embargo, existen seis casos de donde aún se desconoce su procedencia. El primer caso notificado en México fue de una mujer de 54 años de edad, que inició la enfermedad el 10 de febrero de 2019, de Nuevo León, con el genotipo del virus de Europa y África, sin causar mayor afectación debido a que se controló.
En Playa del Carmen, Quintana Roo se han notificado tres casos. Una mujer de 50 años con inicio de la enfermedad el 27 de mayo; un hombre de 18 años – 4 de agosto-,y una joven de 23 años -17 de agosto. En cuanto a Playa Aventura, Quintana Roo, una mujer de 27 años 17 de agosto y un varón de 51 años 19 de agosto.
En Coacalco, Estado de México, la afectada es una mujer de 32 años el 1 de agosto y en la capital de San Luis Potosí una joven de 22 años el 3 de agosto. También se han visto afectados a 4 menores: una bebé de 11 meses, en Ecatepec, Estado de México 20 de julio; tres de Ciudad Juárez, Chihuahua, de 2 años 26 de julio; 10 meses 25 de julio y de cuatro años 9 de julio. Estos dos últimos carecieron de pruebas, pero se confirmaron serológicamente como de “baja avidez”.
“El sarampión se caracteriza por fiebre, enrojecimiento de ojos, congestión nasal, tos, manchas pequeñas dentro de la boca y exantema (ronchas pequeñas) que inicia en cara y cuello y después se extienden a todo el cuerpo; se transmite por contacto directo con gotitas provenientes de la nariz, de la boca o la garganta de una persona infectada”, de acuerdo con la dependencia federal que lanzó avisos epidemiológicos de prevención a los viajeros.
En abril de 2019, Hugo López-Gatell, subsecretario de Prevención y Promoción a la Salud, informó que en México existe el «riesgo potencial» de sufrir contagio del virus del sarampión circulante en el extranjero debido a que, en la pasada administración, las coberturas de vacunación para proteger a la sociedad de epidemias oscilaron en 70 por ciento, lo «más bajo históricamente», cuando debieron estar por encima del 95 por ciento con lo que se garantiza no contraer la infección.
Si bien en México no ha registrado un sólo caso autóctono de sarampión desde 2006 y los identificados, hasta ahora, son dos importados, López–Gatell advirtió, en aquella ocasión, que hay focos rojos, en Estados Unidos, cuya ciudad de Nueva York, se declaró en alerta epidemiológica, asimismo «existe preocupación por el brote que continúa en la región fronteriza de Brasil y Venezuela». Si una persona se infecta puede contagiar hasta 50, algo que no sucede, por ejemplo, con influenza con un índice de contagio de 1.6 por cada infectado.
Por eso, dijo, el constante flujo y desplazamiento de viajeros por las vías aéreas colocan al país en un «riesgo continúo de casos de importación», lo cual no significa re-emergencia, pero aquí la preocupación reside en el hecho de que esas personas del exterior infectadas tengan contacto con mexicanos sin inmunidad contra el sarampión debido al incumplimiento de los esquemas.
«Nos dejaron, en la administración pasada, con un déficit de más de 700 mil vacunas que no fueron administradas y esto nos implica una mayor vulnerabilidad de propagación a partir de casos importados si entran en contacto con personas no inmunizadas”, precisó en aquel abril tras referir el muestreo y toma de sangres para analizar si existen anticuerpos anti-sarampión en el sureste del país, básicamente en Chiapas, Oaxaca y Veracruz, y «obtener la respuesta definitiva del nivel de protección».
En la actualidad, el Instituto Nacional de Salud Pública, Vigilancia Epidemiológica y una Encuesta sin concluir reportaron que en zonas marginales y de alta pobreza se registraron «coberturas de vacunación bajas contra el sarampión, que rondan entre el 70 y 75 por ciento de cobertura.
Recordar que sarampión es la enfermedad infecciosa más transmisible del ser humano y para tener una protección poblacional adecuada se requieren coberturas por arriba del 95 por ciento”. La crisis sanitaria en Venezuela derivó en el resurgimiento del virus y su rápida expansión a 11 naciones americanas.