Reyna y Juan Daniel, papás de un niño de 3 años con discapacidad motora y de habla, pidieron ayuda al gobernador de Puebla, Alejandro Armenta Mier para que intervenga ante la Secretaría de Educación Pública (SEP) del estado ante la discriminación que sufrió el menor en una institución educativa.
Durante una conferencia de prensa que ofrecieron por el Día Internacional de las personas con discapacidad, consideraron que hay ignorancia de las autoridades educativas en materia de políticas públicas para apoyar y dignificar a las personas con diversidad funcional.
Según los progenitores, el director de Educación Especial de la SEP, Héctor Rojas, no ha dado respuesta a sus solicitudes tras la discriminación que vivió el menor en el jardín de niños Xicoténcatl, localizado en la colonia 10 de Mayo, en la ciudad de Puebla.
Derivado de lo anterior, solicitaron una reunión directa con el gobernador Alejandro Armenta Mier, así como una reparación del daño psicológico y económico que ha enfrentado su familia.
«No entienden las maestras y maestros que son niños que ocupan un cuerpo diferente», son personas en situación de discapacidad», declararon.
Agregaron que la discapacidad no se soluciona con la creación de rampas o la entrega de bastones, sino con la capacitación a docentes y funcionarios para que no incurran en actos de discriminación o comentarios revictimizantes.
Por su parte, Daniel Aquino, activista y defensor de derechos humanos, expresó que el caso del hijo de Reyna y Juan Daniel es una de las millones de historias que existen en Puebla y el país.
Y dijo que, en el estado, solamente una de cada cuatro personas con discapacidad logran tener una escolaridad más arriba del nivel secundaria debido a la falta de políticas públicas eficientes para ese sector.
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