En 30 años el municipio se ha afectado con obras como Lomas de Angelópolis, la Recta a Cholula y la Vía Atlixcáyotl, y la generación de la Reserva Territorial Atlixcáyotl-Quetzalcóatl.
Los integrantes de “Cholultecas Unidos en Resistencia” afirmaron que en poco menos de 30 años, los habitantes de San Andrés Cholula han perdido 40 por ciento de su territorio a causa de la especulación inmobiliaria.
En conferencia de prensa, aseguraron que los pueblos originarios de la zona comenzaron a ser despojados por la autoridad, desde el arranque de proyectos viales como la Recta a Cholula y la Vía Atlixcáyotl, y la generación de la Reserva Territorial Atlixcáyotl-Quetzalcóatl.
Mencionaron que luego fueron afectados por los inversionistas que generaron zonas residenciales, como La Vista y Lomas de Angelópolis, mismos que desde su perspectiva, fueron “ampliaciones” de la ciudad de Puebla.
Por esa razón, demandaron que la presidenta municipal de San Andrés Cholula, Karina Pérez Popoca, ya derogue el Plan de Desarrollo Urbano Sustentable aprobado al final de la gestión del panista Leoncio Paisano Arias.
También exigieron que modifique nuevamente los usos de suelo en las juntas auxiliares de Tlaxcalancingo, Acatepec y Cacalotepec, para evitar nuevas construcciones de grandes edificios de vivienda y terminar con los aumentos en los cobros de impuesto predial.
Apuntaron que para ello, la próxima semana entregarán un escrito a la alcaldía, a pesar de que se realizaron diversas reuniones y la propia munícipe se comprometió a terminar con con el plan de desarrollo urbano.
En ese contexto, adelantaron que reunirán a especialistas originarios de sus propias comunidades para desarrollar un nuevo plan de desarrollo, donde se prohiban entre otras cosas, construcciones por encima de los cinco pisos de altura.
Igualmente, se pedirá que haya un “uso de suelo para la conservación y crecimiento natural de nuestras comunidades, donde los usos, costos y trámites que se den al interior de nuestros territorios sean adecuados cultural y socialmente a las condiciones de los que habitamos originalmente”.
Esto, además de respetar y promover los cultivos de maíz, nopal y de traspatio, y que se respete el uso de los pozos noria.