El ajuste, confirmado por un portavoz pero sin cifras específicas, se enmarca en una serie de recortes que han implementado grandes tecnológicas como Microsoft, Meta y CrowdStrike a lo largo de 2025.
Parte de los empleados afectados son del grupo denominado “especialistas”, responsables de colaborar con clientes para impulsar el desarrollo de productos y potenciar la venta de servicios en la nube.
“Hemos tomado la difícil decisión empresarial de eliminar algunos puestos en equipos específicos de AWS. (…) Estas decisiones son necesarias mientras seguimos invirtiendo, contratando y optimizando recursos para ofrecer innovación a nuestros clientes”, declaró el portavoz de Amazon en un comunicado enviado por correo electrónico.
Pese a los recortes, AWS sigue consolidando su crecimiento. Los resultados del primer trimestre de 2025 reflejan un alza del 17% en ventas, que llegaron a 29.300 millones de dólares, y un incremento del 23% en ingresos operativos, que alcanzaron los 11.500 millones de dólares.
La ola de ajustes no se limita a AWS: Amazon ha aplicado recortes en otras áreas, como su unidad de libros, los departamentos de dispositivos y servicios, y la división Wondery de pódcast.
El proceso responde a una estrategia impulsada por Jassy para eliminar niveles de burocracia y reducir la cantidad de mandos intermedios, en busca de una mayor eficiencia operativa dentro de la organización. Al cierre de marzo de 2025, la organización contaba con una fuerza laboral global de 1,6 millones de personas, sumando empleados a tiempo completo y parcial.
El verdadero temor de los trabajadores de Amazon, según Jeff Bezos
Desde su fundación, Amazon ha construido su identidad empresarial sobre una idea clave: el cliente ocupa el lugar central en cada decisión y proceso. Este enfoque, impulsado desde el inicio por Jeff Bezos, ha diferenciado a la compañía respecto a otras firmas del mercado y ha modelado sus operaciones internas y externas.
Lo que comenzó como una simple librería en línea en 1994 rápidamente adoptó una orientación absoluta hacia la satisfacción del usuario, planteando una apuesta que resultó ser el fundamento del posterior éxito y diversificación del gigante tecnológico.
Hoy en día, Amazon ofrece un portafolio de productos que va mucho más allá de los libros; entre sus categorías se encuentran artículos electrónicos, ropa, juguetes, muebles, electrodomésticos y hasta herramientas o productos para mascotas. El principio de adelantarse a las expectativas del cliente se ha traducido en una expansión constante y en la consolidación de la empresa como líder indiscutido del comercio electrónico global.
Sin embargo, este compromiso con la satisfacción del usuario ha ido acompañado de una fuerte exigencia dentro de la fuerza laboral de Amazon. El estándar de excelencia promovido por Bezos generó una dinámica interna marcada por altos niveles de presión.
En una entrevista con CNET, Bezos dijo lo siguiente: “Les pido a todos aquí que se despierten aterrorizados cada mañana, con las sábanas empapadas de sudor. No deberían tener miedo de nuestra competencia. Deberían tener miedo de nuestros clientes”. Estas palabras, pronunciadas por el fundador antes del año 2000, describen el clima de dedicación y alerta permanente que, según Bezos, debe regir la actitud de su equipo.
En sus declaraciones, Bezos fundamenta esta filosofía en la naturaleza cambiante de la lealtad de los consumidores: “Porque con ellos tenemos una relación. Y creo que nuestros clientes nos son leales hasta el segundo en que alguien les ofrece un mejor servicio”, detalló en la misma conversación. Así, la mentalidad de estar siempre un paso adelante en la atención al cliente se convirtió en uno de los pilares del modelo de negocios que distingue a Amazon en el competitivo entorno global.
Con información de INFOBAE.
Sigue la información de última hora en las redes sociales de URBANO Noticias Puebla y Tlaxcala.
