La restricción incluye cruceros y viajes educativos grupales, en un intento por presionar a la isla comunista para que deje de apoyar al presidente de Venezuela.
El gobierno de Estados Unidos impuso el martes nuevas y duras restricciones para que sus ciudadanos viajen a Cuba, incluida una prohibición a las visitas en cruceros, en un intento por presionar a la isla comunista de régimen comunista para que deje de apoyar al presidente venezolano Nicolás Maduro.
El endurecimiento del embargo estadounidense sobre la isla más grande del Caribe afectará aún más su economía y perjudicará a las compañías turísticas estadounidenses, que habían establecido negocios con Cuba durante el breve proceso de distensión entre La Habana y Washington en el periodo 2014-2016 bajo el mandato del expresidente Barack Obama.
El Departamento del Tesoro dijo en un comunicado que Estados Unidos ya no permitirá los viajes educativos grupales a la isla, una de las excepciones más populares a la prohibición general del turismo estadounidense a Cuba.
Estados Unidos tampoco permitirá visitas a Cuba a través de buques de pasajeros y recreacionales, entre ellos cruceros y yates, así como aeronaves privadas y corporativas, agregó el Tesoro.
El gobierno de Donald Trump anunció las nuevas restricciones en abril como parte de su batalla contra el socialismo en América Latina.
El mes pasado, Washington también permitió a los ciudadanos estadounidenses presentar demandas contra compañías extranjeras por el uso de propiedades expropiadas tras la revolución cubana de 1959, perjudicando la inversión en la isla.
“La administración (Trump) ha avanzado en la política del presidente sobre Cuba, al poner fin al ‘turismo encubierto’ a Cuba e imponer restricciones a los barcos”, dijo en un tuit el asesor de seguridad nacional de Trump, John Bolton.
“Continuaremos tomando medidas para restringir el acceso del régimen cubano a los dólares estadounidenses”, añadió.
El ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez, dijo en Twitter que la medida es “un ataque contra el derecho internacional” y que el embargo comercial es el principal obstáculo para el desarrollo del país.
Rechazo enérgicamente el anuncio de #EEUU de nuevas sanciones contra #Cuba que restringen los viajes de estadounidenses y endurecen el bloqueo. Pretenden asfixiar la economía y dañar el nivel de vida de los cubanos para arrancarnos concesiones políticas. Fracasarán otra vez.
— Bruno Rodríguez P (@BrunoRguezP) 4 de junio de 2019
Los viajes desde Estados Unidos a Cuba habían aumentado en los últimos años después de que Obama aflojó las restricciones, al permitir el restablecimiento de vuelos comerciales regulares y servicios de cruceros.
Estados Unidos se había convertido en la segunda fuente más grande de viajeros a la isla después de Canadá, con una mayoría de ellos llegando en cruceros.
Según el gobierno cubano, 257 mil 500 ciudadanos estadounidenses, sin incluir los de origen cubano, visitaron Cuba entre enero y marzo, y el 55 por ciento llegó en cruceros.