Aunque su fiesta patronal es el 14 de febrero, el Niño Milagroso de Tlaxcala recibió este 30 de abril diversas muestras de fe y agradecimiento.
Para celebrar el Día del Niño, los feligreses organizaron diversas actividades y colocaron en la explanada de la iglesia de San José a la imagen del niño milagroso para su veneración.
Aunque su fiesta patronal es el 14 de febrero, el Niño Milagroso de Tlaxcala recibió este 30 de abril diversas muestras de fe y agradecimiento, entre ellas la celebración de dos homilías y la recepción de juguetes como agradecimiento por los favores recibidos.
La imagen del niño Dios tienen más de 105 años de antigüedad, su capilla estaba integrada en la iglesia de San José, ubicada en el centro histórico de Tlaxcala, pero por los daños que sufrió ese templo tras el sismo del 19 de septiembre de 2017 fue extraído del templo y colocado en una capilla improvisada a un costado de la iglesia; desde ese momento las oficinas de la iglesia se han convertido en su hogar, pero eso no ha mermado su veneración.
Para celebrar el Día del Niño, la imagen fue colocada entre un altar decorado con coloridos globos, en la explanada del templo en reconstrucción donde se celebraron dos homilías para festejar al niño.
Al lugar, llegaron muchos feligreses a mostrarle sus respetos, cariño y agradecimiento. Alfredo acudió para regalarle un carro de control remoto, con lo que le agradeció el haberlo sanado, “es una manda que tengo con el Niño Milagros, porque él me curó, me habían detectado una enfermedad que poco a poco terminaría con mi buena calidad de vida, mi mamá me dijo que debía encomendarme al sagrado niño para que me devolviera mi salud, al principio me negué pero después conforme avanzaba mi enfermedad me convencí y lo hice, ahora no estoy completamente sano, pero con el tratamiento médico y siguiendo las órdenes estoy mejorando.”
Como esa, hay un sinfín de historias, una de ellas es la registrada el 28 de febrero de 1934, cuando una mujer sufrió el disparo de una arma de fuego que la dejó gravemente herida, tenía una hemorragia interna, en ese entonces el acceso al servicio médico era ineficiente, por lo que sus familiares hicieron lo posible por curarla, por lo que sus familiares invocación del Santo Niño Milagroso para que la sanara; después cuando por fin un médico logró llegar a su hogar la revisó y dio la mala noticia a sus hijos y esposo, no había nada que hacer para salvarla.
No obstante, la familia no se dio por vencida y siguió rezando y pidiendo al niño Dios, y al cuarto día la señora mostró mejoría y se salvó. Y este mes del niño, los feligreses pidieron por la salud, estabilidad y seguridad de los menores de edad, para que su desarrollo sea en condiciones de bienestar y paz, no solo de los niños y niñas tlaxcaltecas, sino del País y del mundo.