La responsabilidad social de las empresas debe contemplar la promoción de la salud de los trabajadores.
Las empresas deben considerar entre su responsabilidad social la nutrición de sus trabajadores.
Parte de la labor de una organización es favorecer la salud física de los colaboradores, opina Hania González Terrones, especialista en nutrición clínica y vicepresidenta de la Fundación de Obesidad, Diabetes y Síndrome Metabólico.
Para promover la nutrición de sus colaboradores, González recomienda a los directores de Recursos Humanos los siguientes 7 puntos:
Asesoría con un especialista: No basta con llenar el comedor de frutas y jugos, el exceso no es saludable. Informarse adecuadamente ayuda a tener las cantidades necesarias.
Disminuir el sedentarismo: Los directores de Recursos Humanos pueden promover dinámicas para que los empleados no estén todo el tiempo sentados.
Escaleras vs elevador: Bloquear el elevador cuando no se suben muchos pisos es una acción que no genera un gasto y se puede complementar con letreros en las escaleras con frases motivadoras como “subiste 15 escalones y alargaste tu vida”.
Comida saludable en comedores: Es un mito que la comida sana es más cara que unos tacos. En las medidas indicadas, los productos de la canasta básica son una fuente sana de alimentación.
Si una empresa tiene el servicio de comedor, con asesoría de un especialista, puede cambiar su menú sin invertir más dinero.
Las cantidades sí importan: Un poco de azúcar no hace daño, un chocolate pequeño es mejor que tener muchos jugos.
Un vaso de agua no se le niega a nadie: Procurar que en la empresa haya suficientes dispensadores de agua es importante y representa un ahorro para los colaboradores.
“Algunas personas prefieren consumir agua cuando es gratis, en vez de comprar un refresco”.
Cambiar la mentalidad de los jefes y ajustar horarios: De nada sirve que las empresas ofrezcan gimnasio o clases de zumba si los jefes y las jornadas no permiten a los colaboradores usar esos servicios.
La buena nutrición está ligada con la prevención de enfermedades. Una mala salud no sólo afecta la vida personal, también impacta en el trabajo, enfatiza Hania González.
“El trabajo es donde la mayoría de las personas pasa más tiempo”, dice González en entrevista con Factor Capital Humano.
Promover la nutrición no es un gasto, es una inversión; por eso las compañías deben priorizar entre su presupuesto, programas y acciones que ayuden a sus colaboradores a tener buena salud.
En México los niveles de sobrepeso y obesidad son altos, asegura la especialista.
Esta es la razón por la cual las empresas no pueden dejar el combate de esas enfermedades a las políticas públicas.