Durante el siglo XIV, la ‘muerte negra’ como se le nombró, acabó matando a aproximadamente el 60 por ciento de la población en Europa.
Autoridades de Salud en el estado de Wyoming, Estados Unidos, confirmaron tres casos de la peste negra en gatos.
Mediante un comunicado, la dependencia informó que hasta el momento ningún humano ha sido diagnosticado con la plaga, pero alertó a la población sobre los síntomas que se pueden presentar como agotamiento extremo, vómitos y diarrea, además de sensibilidad en las glándulas linfáticas y la aparición de bubones en brazos y pies.
El Departamento de Salud de Wyoming detalló que los casos detectados en animales no parecen estar vinculados pues fueron encontrados en condados diferentes.
El caso más reciente involucró a un gato en la pequeña ciudad de Kaycee.
Las autoridades dijeron que se sabía que el animal vagaba al aire libre.
La enfermedad fue confirmada por el Laboratorio Veterinario del Estado de Wyoming en Laramie.
Fue en 2018 cuando se detectó el último caso en humanos de la peste bubónica.
Esta enfermedad es transmitida a los humanos de animales enfermos gracias a las pulgas.
Según los Centros para el Control de Enfermedades, la enfermedad es una de las tres plagas propagadas por la transmisión de la bacteria Yersinia Pestis.
Sin embargo, rara vez se transmite de humano a humano; en promedio, hay alrededor de siete casos de humanos que se contagian de la plaga por año en los Estados Unidos.
Durante el siglo XIV, la ‘muerte negra’ como se le nombró, acabó matando a aproximadamente el 60 por ciento de la población en Europa.