El rector Alfonso Esparza indicó que esta merma presupuestal no afecta los salarios ni el pago de aguinaldo para académicos y administrativos.
“De despedida”, la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) recibirá en diciembre un recorte presupuestal por 27 millones de pesos por parte del gobierno federal, con lo que en 2018 sumó alrededor de 150 millones de pesos, informó el rector Alfonso Esparza Ortiz.
En entrevista posterior al tradicional encendido de luces que adornan el árbol de Navidad en el CCU, Esparza Ortiz señaló que la BUAP aún no recibe la partida presupuestal para diciembre próximo, pero todavía “no está clara la parte que deberían entregarnos; hay otro recorte para variar, de despedida, son cerca de 27 millones de pesos, lo que nos están recortando”.
El nuevo recorte, dijo, afectará los gastos operativos, habrá menos autorizaciones de viajes, menos participación en congresos, por lo que afecta sobre todo a académicos e investigadores que no tienen presencia en eventos a los que siempre acudían.
Mientras que el área de infraestructura, está “parada” hasta que la Secretaría de Administración y Finanzas (SFA) les apruebe la solicitud para adquirir el crédito de 200 millones de pesos y que confío que sea en los siguientes días.
En ese tenor, mencionó que ya tuvo acercamiento con el Congreso local, por lo que la solicitud será turnada a las comisiones respectivas, mientras la SFA les da el oficio en el que acredita que la institución es viable financieramente para adquirirlo.
Confió en que con el próximo gobierno federal que encabezará Andrés Manuel López Obrador, ya no se den los recortes y por el contrario regresen los fondos concursa bles, ya que siempre en ellos la BUAP obtenía recursos.
Hospicio sería convertido en centro cultural
Sobre la donación del inmueble de la Avenida Reforma 710 donde se ubicaba el Antiguo Hospicio de Puebla, dijo que la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) lo afectaría como un Centro Cultural Vivo, que concentre talleres y diplomados de rescate al patrimonio, sirva de espacio para ensayos y presentación de las compañías de danza, así como de la orquesta universitaria.
“El proyecto es muy interesante, queremos hacer todo barrio universitario, por los antecedentes del edificio, en parte de un tema jesuita, para poderle recibir y darle ese uso cultural netamente”, expresó.