Nuria Sanz, directora de la UNESCO en México, señaló que el patrimonio edificado debe coexistir con la vida cotidiana de las ciudades.
La directora de la UNESCO en México, Nuria Sanz, rechazó que el ambulantaje sea un factor de riesgo para que Puebla capital pierda su nombramiento como Ciudad Patrimonio Cultural de la Humanidad.
La especialista consideró que el patrimonio edificado no debe excluirse de la vida cotidiana en los lugares donde se encuentra, aunque refirió que todas las actividades deben estar debidamente reglamentadas. Recordó que la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura siempre se ha pronunciado por alcanzar equilibrios, pues no puede considerarse que el patrimonio tiene un uso exclusivamente turístico.
“Los mercados y toda la vida de la ciudad tendrá que estar regulada en sus equilibrios funcionales, es lo que dice siempre la UNESCO y la vida no se va de ningún sitio, solo que sí debe responder a un sistema de equilibrios funcionales para que en un centro histórico no sólo haya lugares turísticos, sino que haya escuelas, mercerías, panaderías y todo aquello que haga que la vida del centro responda a la funcionalidad que quieren sus ciudadanos”.
Esto, luego que con el inicio de la administración de Claudia Rivera Vivanco, los comerciantes ambulantes regresaron al centro de Puebla y las autoridades de Morena aseguraron que no los quitarán con la fuerza pública.