Ambulantaje, Ándale, cierre de calles al transporte, inseguridad.
En el último año, cerca de 200 negocios en el Centro Histórico han cerrado debido a factores como la inseguridad, el sismo del 2017, el cierre de vialidades para el transporte público, aumentos de costos en servicios y la competencia desleal del comercio informal.
Así lo reveló, José Juan Ayala Vázquez, presidente del Consejo de Comerciantes del Centro Histórico, quién estimó que son aproximadamente 800 familias las que han resultado afectadas por estos cierres.
En ese sentido, advirtió que el comercio informal se duplicó durante el periodo de transición del gobierno, por lo que en las calles del Centro Histórico, estimó, hay unos dos mil 200 ambulantes, no obstante, dijo esperar que la administración de Rivera Vivanco encuentre una solución sobre el tema e implemente políticas para recuperar empleos y evitar cierres de negocios.
Resaltó que las acciones de la nueva administración sobre ambulantaje deben ceñirse al Código Reglamentario Municipal (Coremun) de Puebla, pues “nada ni nadie debe estar por encima de la ley”.
Ándale dejó pérdidas del 10% a comercios.
Por otra parte, junto con la Asociación Poblana de Restaurantes y Prestadores de Servicios AC (Aprepsac) manifestaron su rechazo a la iniciativa de peatonalización Ándale, pues no arrojó números positivos para los comerciante al registrar una baja de ventas de entre el 10 y 15 por ciento.
En su intervención, Daniel Santin Baroeta, experto en movilidad, expuso que para que se cierre el acceso vehicular en calles principales Centro Histórico deben existir mejores alternativas de traslado además de la peatonal.
Y es que, al comparar el programa con la ciudad de Medellín, dijo que el sistema bicicletas públicas del Centro Histórico de Puebla tiene apenas cerca de mil membresías, mientras que dicha ciudad colombiana cuenta con 65 mil usuarios registrados que realizan 12 mil viajes diarios y en la Angelópolis se contabilizan 45 mil viajes pero al año.