El doctor Phillips informó además que en la actualidad su equipo trabaja en proyectos de atomtrónica y simulación cuántica.
“Entre más entiendo la naturaleza, más bella me parece”. Así lo expresó el doctor William D. Phillips, Premio Nobel de Física 1997, en un encuentro con la prensa ayer por la tarde en esta ciudad.
El doctor Phillips, quien fue el invitado de honor del LXI Congreso Nacional de Física que se realizó en el Complejo Cultural Universitario de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) a lo largo de esta semana, afirmó además que en la ciencia actual se viven tiempos muy emocionantes.
El encuentro con los periodistas se llevó a cabo minutos antes de que el científico impartiera ante un auditorio lleno la plática “Quantum information”. En este breve acercamiento con los medios, el doctor Phillips estuvo acompañado por dos destacados científicos mexicanos: los doctores Luis Orozco, investigador del Joint Quantum Institute de la Universidad de Maryland, y Arturo Fernández Téllez, investigador de la Facultad de Ciencias Físico Matemáticas de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP).
En el mensaje de bienvenida, el doctor Fernández Téllez refirió que la presencia del doctor Phillips en esta ciudad se dio en el marco del Congreso Nacional de Física que, en esta edición 2018, rompió todos los récords de asistencia y de número de charlas y carteles.
Los periodistas le hicieron preguntas al doctor William D. Phillips relacionadas con su trabajo científico, su visión de la ciencia actual, sus mayores retos, la divulgación para niños, el papel de la universidad, la relación ciencia-religión y sus proyectos actuales, entre otros temas.
Interrogado sobre la diferencia entre la ciencia mexicana y la que se hace en otras partes del mundo, el Premio Nobel de Física comentó que es difícil hacer comparaciones, pero que él ha colaborado con excelentes científicos y estudiantes mexicanos que están al mismo nivel que los de otros países.
Asimismo, el también investigador del National Institute of Standards and Technology (NIST) de Estados Unidos expresó que el mayor reto científico que ha tenido ha sido también el que más satisfacción le ha dado. Esto ocurrió en los años ochenta cuando en su laboratorio realizaba junto con su equipo experimentos de enfriamiento de átomos con láser.
“Otras personas habían realizado la teoría y nosotros estábamos haciendo los experimentos, y nuestros experimentos estaban produciendo resultados que no esperábamos, eran extraños, los átomos no se comportaban según la teoría. Descubrimos que la temperatura de los átomos era más baja que la que predecía la teoría. Esto cambió todo y abrió un mundo nuevo en la Física”, apuntó.
Explicó que el trabajo de enfriamiento de átomos tiene aplicaciones importantes, y una de ellas son los relojes atómicos, sin los cuales los GPS serían impensables. Cuestionado acerca del tema de las pinzas ópticas, dijo que ahora están en la mente de todos porque hace unos días el Premio de Nobel de Física le fue otorgado a Arthur Ashkin por las pinzas ópticas y su uso en sistemas biológicos. “Este trabajo, que me ha inspirado a mí y a muchos, tiene aplicaciones en el campo de la física atómica, en nanotecnología y en biología. Vivimos tiempos emocionantes”, subrayó.
El doctor Phillips informó además que en la actualidad su equipo trabaja en proyectos de atomtrónica y simulación cuántica. Finalmente, dijo que la Física actual, sobre todo aquella que usa los aspectos más extraños de la mecánica cuántica, nos depara muchas sorpresas. El Dr. Phillips realizó estudios profesionales en el Juniata College y de posgrado en el MIT, donde obtuvo el grado de doctor en 1976.
Ingresó como físico al National Bureau of Standards, ahora NIST. Ha sido profesor visitante en la Ecole Normale Supèrieure en París y en la Universidad de Oxford, y actualmente es Profesor Distinguido de la Universidad de Maryland. Desde 2008 es Fellow del Joint Quantum Institute (JQI) y codirector del NSF Physics Frontier Center en el JQI. Ha recibido diversos reconocimientos como la Gold Medal del Departamento de Comercio de Estados Unidos, la Michelson Medal del Franklin Institute y el Premio Nobel de Física en 1997. Es miembro de la American Academy of Arts and Sciences y de la National Academy of Sciences.
Es Honorary Doctor of Science del Williams College, Doctor Honoris Causa de la Universidad de Buenos Aires, miembro de la European Academy of Arts, Sciences and Humanities, Honorary Freeman of the Worshipful Company of Scientific Instruments del Reino Unido, Honorary Member de la Optical Society of America, Miembro Honorario del Instituto de Física de la Universidad de Sao Paulo, Doctor Honoris Causa de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP) y Miembro Correspondiente de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC). El doctor Phillips es reconocido mundialmente por sus trabajos en la investigación del enfriamiento de átomos con láser, trabajos con condensados de Bose Einstein y espectroscopía de alta precisión.
Ha impartido cursos y seminarios en el CINVESTAV, el IPN, la UASLP y la UNAM. En su grupo en el NIST han hecho su posdoctorado los mexicanos Eduardo Gómez García y Alberto Merino y su doctorado Karina Jiménez García y Neil V. Corzo Trejo. Ha tenido un papel central en la formación de recursos humanos de México. Ha colaborado con grupos académicos del CINVESTAV, la UNAM, la UASLP, la Universidad de Guanajuato, el Tecnológico de Monterrey y el INAOE.