Los estados del país afectando por este delito, principalmente, son: Ciudad de México, Estado de México, Morelos, Querétaro, Hidalgo, Guanajuato, Puebla, Tlaxcala y Veracruz.
Los distribuidores de gas licuado de petróleo (LP) alertaron sobre el crecimiento del robo del energético en ductos y pipas, lo que representa un quebranto por mil 102 millones de pesos mensuales para Petróleos Mexicanos (Pemex) y gaseras.
En conferencia de prensa, los representantes de la Cámara Regional del Gas, Efrén Rodríguez; Luis Landeros, de la Asociación de Distribuidores de Gas LP (ADG); Jaime Ayala, de Amexgas, y Alfredo Zahoul, de Asocinor, explicaron que ese ilícito se agudizó desde hace dos años y se presenta a escala nacional, afectando principalmente a Ciudad de México y los estados de México, Morelos, Querétaro, Hidalgo, Guanajuato, Puebla, Tlaxcala y Veracruz.
El robo, agregaron, ha crecido tanto que la afectación de algunos mercados pasó de 5 por ciento en 2017 a cerca de 15 puntos porcentuales a escala nacional en lo que va del año.
Detallaron que por el robo de gas LP existe un quebranto de mil 102 millones de pesos mensuales, de los cuales 70 por ciento afecta a Pemex y 30 a las distribuidoras del energético. La industria calcula que el robo de gas LP a escala nacional asciende a unas 58 mil toneladas.
Por otra parte, el robo de autotanques y semirremolques a la industria formal va en aumento. Desde 2017 se han contabilizado cerca de 200 unidades hurtadas, con el consecuente impacto en la seguridad del personal administrativo y operativo de las compañías.
Ante ese panorama, la industria se ha visto obligada a modificar sus esquemas de operación. Durante el primer semestre de este año se han tenido que suspender 17 rutas de distribución, debido a la inseguridad. Además, existe la posibilidad de que en el segundo semestre se cancelen otras 17.
Como muestra de la situación, en los pasados dos meses, sólo en el llamado triángulo rojo, región que forman Puebla, Tlaxcala y Veracruz, el robo ha crecido 56 por ciento, pasando de 40 millones de pesos al 30 de mayo anterior a más de 62 millones en agosto.
El robo del gas LP adquiere una nueva dimensión debido a la distorsión que ha generado en el mercado, ya que los grupos criminales lo ofrecen a menos de la mitad de su costo en el mercado formal, afectando la sana competencia.
Advirtieron que de continuar esta situación, se calcula una posible pérdida de hasta 14 mil empleos formales directos y casi 50 mil indirectos en todo el país, por las afectaciones a la cadena de distribución.
La industria de este último sector señaló que el volumen robado representa un riesgo exponencial para los consumidores, pues de los 30 millones de servicios al mes, aproximadamente 2 millones 320 mil son clandestinos y ponen en peligro a miles de familias.
Los distribuidores de gas LP consideraron que falta coordinación entre las dependencias de seguridad, y destacaron que es un problema que Pemex y las agencias de seguridad tienen que atender.
Mencionaron que buscarán acercamiento con el nuevo gobierno y, en especial, con la próxima titular de la Secretaría de Energía (Sener), Rocío Nahle, para exponer la problemática y posibles soluciones.
Estimaron que el precio de gas LP podría subir en invierno, como sucede cíclicamente, aunque también depende de los inventarios mundiales y el tipo de cambio, entre otros factores.